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martes, 8 de septiembre de 2015

VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES PERIODISTAS EN OAXACA

 -No se mata la verdad matando a mujeres periodistas.


Por: Lisania Esteva

La violencia es el comportamiento deliberado que "atenta contra la   integridad de la persona". Y es una problemática social que ha venido, creciendo con el paso del tiempo. Sin embargo, esta ha sido denunciada por grupos organizados en todo el mundo, por ser uno de los problemas que atenta contra su integridad al igual contra sus derechos humanos, todo esto es consecuencia de la inequidad y el poder que existe entre hombres y mujeres.

La violencia contra las féminas ha sido naturalizada y tolerada por la sociedad y el Estado; la reproducción de esta mediante imágenes y creencias que continuamente las culpabilizan y las hacen responsables de la agresividad de los otros, es entonces donde se presenta la indiferencia de la comunidad al ver una muestra de violencia.

 Por ello el Artículo 1 de la Declaración de Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (1993) la define como "todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o puedan tener como resultado tanto el sufrimiento físico, sexual, psicológico para la mujer inclusive, las amenazas de dichos actos, o la privación de la libertad, si se produce en la vida pública como en la privada.

La violencia de género se expresa en distintas formas, ámbitos y relaciones como son la violación, acompañado del hostigamiento sexual, la violencia en el hogar, violencia patrimonial, económica y la que se ha venido desarrollando con más fuerza el "feminicidio".
Oaxaca ocupa el primer lugar en Violencia de Género, es por estas cifras que el ejercicio del periodismo también se ve empañado por este problema. Al darse a conocer que el estado ocupa también el primer lugar en Violencia contra las Mujeres Periodistas, seguido por entidades como: el Estado de México, Chihuahua y Coahuila sin olvidar; que México también es uno de los 5 peores países en donde las oportunidades son escasas para las mujeres.

En la presentación del Informe diagnóstico sobre violencia contra mujeres periodistas. México 2010-2011, San Juana Martínez lamentó que Oaxaca se mantenga en el primer lugar

del país con violencia de género desde hace varios años. “Por eso no es de extrañarse que también ocupe el primer lugar en violencia contra las mujeres periodistas”, violencia que se desarrolla en el ámbito laboral, donde ejercen su labor.

Cuando se ataca a una periodista se ataca a la sociedad, en el 2005 las reporteras no formábamos parte de las estadísticas periodísticas, el 82% de los atentados cometidos contra las mujeres periodistas se desarrollaron en el sexenio de "Felipe Calderón".
Aunque los tan conocidos discursos que oímos señalen que las comunicadoras así mismo, como las defensoras de los derechos humanos agredidos en el país son en la mayoría violentados por cárteles, o grupos de delincuencia organizada, el 81% de los agresores son funcionarios públicos municipales, estatales, y nacionales.

Las víctimas en edades promedio son mujeres de 22 a 42 años de edad, según un estudio realizado por el CIMAC (Comunicación e Información de la Mujer), entre los años de 2010 y 2011 y del 2002 al 2013 se han registrado 20 casos de violencia, sumándole que en Oaxaca del 2010 al 2012 la violencia contra las mujeres periodistas incrementó.

En dicho informe la periodista Lydia Cacho, cuestionó al gobierno actual lo siguiente: Lydia Cacho: “…Yo quiero preguntarle al gobernador Gabino Cué lo mismo que le pregunto a cada gobernador cuando voy por los estados en el país, ¿a qué le tiene miedo el señor gobernador?, ¿a qué le tienen miedo los treinta y dos gobernadores de este país?, ¿a qué le tienen miedo los treinta y dos procuradores más el Distrito Federal, Mancera y el Procurador también?, ¿a qué le tienen miedo cuando salen a la calle?, ¿a qué le tienen miedo cuando caminan en la noche por las calles de su ciudad?, ¿a qué le tienen miedo cuando las o los periodistas decimos el feminicidio se está convirtiendo en una epidemia en este país?

¿Por qué tienen miedo de admitir que este es un problema monumental que tiene una carga cultural diferente? ¿Por qué  tienen tanto miedo de admitir que hay una diferencia monumental entre asesinar a una persona, por casualidad, por robo, que asesinar a una persona porque quiere defender su dignidad, su libertad, y porque es mujer, y porque se resiste y se niega a vivir en las condiciones que la sociedad le ha dicho durante centenas de años que debe vivir?

¿Por qué no pueden defender, y por qué tienen tanto miedo de decir: sí,  nos ha rebasado, sí, tenemos muchas cosas que hacer, y sí, tenemos una gran  responsabilidad.

Y, mi cuarta parte de oaxaqueña me permite preguntarle al gobernador Gabino Cué, ¿por qué no se levanta y es el primero en decir: Oaxaca es el número uno en este momento en violencia feminicida, qué vamos a hacer contra esto?

Él, no es el asesino, él, es el gobernador electo para tomar medidas, tomar decisiones, para impedir que el procurador se detenga, para aportar  los recursos para que no se detenga la procuraduría ante la búsqueda de las y los desaparecidos, para que recuerden todos los días que si no se investiga una desaparición de una mujer en las primeras veinticuatro horas las posibilidades de que muera aumenta en un ochenta por ciento.

Esa si es la responsabilidad señor gobernador, y de todos los gobernadores de este país.

La pregunta para ellos sigue siendo ¿a qué le tienen miedo? Y nuestra respuesta es, trabajen con su miedo porque nosotras estamos trabajando con el nuestro. Y aquí nadie va  resistir, ni va soportar, ni va callar la muerte, la desaparición, el secuestro, el asesinato, de nadie”. Concluyo la periodista.

Lo más grave es que en el estado de Oaxaca, todo este tipo de asesinatos cometidos contra las reporteras de diferentes medios, no están penados por la Ley y es entonces donde prevalece la incertidumbre al respecto por hacer justicia por las víctimas, ya no solamente basta el cuestionamiento al Gobierno al Gobernador y obviamente al  Poder Legislativo por el retraso en la aprobación de leyes y reformas que protejan a las mujeres.

Es claro que en nuestro estado la Cámara de Diputados tenga suspendida la revisión de leyes que protejan a las mujeres, y en cuanto a lo que concierne a las mujeres que ejercen el periodismo y que arriesgan su vida, como en el caso de Regina  Martínez quien fuera corresponsal de la revista Proceso en el estado de Veracruz y a la que hallaron muerta con signos de golpes y estrangulamiento, donde la investigación en cuanto a este caso es ineficiente ya que la anulación de la sentencia que condena al asesino de esta periodista, así como con el resto de los crímenes cometidos contra mujeres y periodistas, siguen en la impunidad porque el gobierno no es capaz de dar la capacitación necesaria para la erradicación de violencia y de asesinatos que ponen en gran peligro la vida de las féminas, sumándole  también no ha habido una investigación debida por parte de las autoridades correspondientes y junto con ello es ineficiente la declaración del Subprocurador del estado de Oaxaca al decir que son 206 feminicidios cometidos en nuestro estado y no 220 como lo declararon las ONG´S (Organizaciones no Gubernamentales).

Por ello es necesario que los Diputados como Diputadas, Senadores y Senadoras establezcan mecanismos legales, los cuales ayuden a las mujeres en general que viven y sufren este cáncer de violencia a romper el silencio en el que se encuentran, además es urgente que se les garantice una vida libre de violencia y que no quede sin seguimiento la  Ley Estatal de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y porque es claro que no se mata la verdad matando a mujeres periodistas.





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